El edificio central de la Sociedad Médica de La Plata está ubicado en calle 50 Nº 374 y fue construido por el Dr. Angel A. Alsina, quien también presidió la Sociedad en 1915.
El edificio fue construido como residencia particular en 1912. En 1932, utilizando la longitud del predio que llegaba a la calle 51, se construyó el “Instituto de Cirugía del Dr. Angel A. Alsina”, hoy desaparecido.
Este destacado cirujano platense nació en 1878. Siendo farmacéutico obtuvo el título de Médico en 1901. Fue Director del Hospital Español de La Plata y también del Hospital Infecto-Contagioso de la Asistencia Pública. Una de sus actuaciones más recordadas por los habitantes de la Ciudad, es la creación del primer Sanatorio Quirúrgico de La Plata, en 1917, a continuación de su residencia, habitada por el Dr. Alsina y su esposa Julia Carranza. Este reconocido cirujano falleció en nuestra ciudad en 1957.
La Sociedad Médica de la Plata ocupa su lugar actual como consecuencia de la compra de la propiedad el 14 de noviembre de 1941, bajo la presidencia del Prof. Dr. Fidel Maciel Crespo y a quien acompañaban en la Comisión Directiva los Profesores Doctores Edmundo Vanni, Paulino Rojas, Julio Roselli, Héctor Giglio, Alberto Zambosco y Luis Pedemonte.
Durante años, la actividad de la Sociedad Médica se desarrolló en forma intensa e ininterrumpida. Sin embargo, a través del tiempo la magnífica construcción experimentó un inevitable deterioro. Para su remodelación no era necesario un presupuesto elevado, sino una persona que conociera la forma de repararla y lo más importante que tuviera preferencia por las mansiones de estilo. Sólo el Prof. Dr. Alfredo R. U. Vitale, con sus amplios conocimientos sobre el tema y su admiración por las antiguas residencias podría abocarse a tan difícil emprendimiento.
Él amplió los ambientes, reparó las maderas deterioradas por parásitos, compró muebles, anexó nuevas arañas y, sobre todo, utilizó los materiales primitivos de la construcción para marcos de cuadros y también para tarimas. Corolario de su actuación: hizo renacer la estructura interior del edificio y le otorgó la suntuosidad de otros tiempos. Por ello, en la actualidad, es admirada y alabada por los que la visitan.
Durante esos años, se comenzó a darle forma a la actual Pinacoteca donde se exponen obras de los más destacados maestros platenses. Las donaciones se sucedieron y, gracias a esa colección pictórica – artística y un piano donado por Manzino que es de los más codiciados por los músicos, fue declarada “Patrimonio Histórico Cultural – Arquitectónico -” por la Municipalidad de La Plata.


